En el Día Mundial de la Educación Ambiental, Parque Tantauco, Fundación Futuro y Fundación Piñera Morel lanzaron el concurso «Crea tu cuento acerca de la importancia de la educación ambiental» que tiene como finalidad fomentar la creatividad y reflexión de la problemática ambiental y la importancia del cuidado del entorno.

Presentamos los cuentos ganadores a continuación:

– Primer lugar
Cuento: «El Huillín y la Botella»
Autor: DIEGO NAVARRO VIVAR

Temprano el Gato Huillín comía una sabrosa trucha por Inio, de pronto escuchó algo salpicar sobre el agua, curioso asomó entre los hualves viendo una botella flotar en el río, un visitante observaba como esta se alejaba… huillín muy apenado asomó ante el visitante y con su larga cola empujó la botella, el desconcertado se dio cuenta que había obrado mal, la botella no pertenecía al río, muy avergonzado la levantó y guardó. El huillín se alejó lentamente y el visitante continuó su camino por Quilanlar. No siempre habrá un Hullin recordándonos cuidar el medio ambiente, está en todos educar.

– Segundo lugar
Cuento: «Gaspar y el campo»
Autor: ANA ARJEL AVENDAÑO.

Al sur de una gran isla y con gran interrogante, Gaspar escucha el canto de cuantiosas aves, pero entre tanto tono, escucha uno curioso que parece estar cerca, pero nunca ver se deja.
Cuenta la leyenda, que si canta por la izquierda a casa debes regresar, dice el tata de Gaspar, pero no lo creas mi pequeño; escurridizo entre coligües observa muy fisgón, y cantando por doquier, desea ver lo que vas a hacer.
Ahora, Gaspar quiere aprender sobre la fauna de su entorno, para poder amar, cuidar y respetar aquellas cosas que con el tiempo se han perdido.

– Tercer lugar
Cuento: «Abrazo a la tierra»
Autora: MARIANELA LOYOLA LIZAMA

Siempre he querido a la tierra abrazar, pero ella está muy triste, porque hemos dejado de cuidarla, la tierra siente que ya no nos importa, además soy tan pequeña que mis brazos no alcanzan a rodearla.
¡La tierra, me habla! ella me dice que tiene tres erres que me va a enseñar.
Reducir, Reciclar y Reutilizar.
Enseguida junto a otros niños me pondré a trabajar codo a codo lo vamos a lograr.
Todos los días cantaré y enseñaré al mundo las enseñanzas que la tierra me ha dado, la ayudaremos a relucir y así todas sus maravillas podremos compartir.
Fin.

– Premio de participación
Cuento: «Mi gran sorpresa»
Autora: LEONOR CARCAMO OYARZUN (5 AÑOS).

Antes de que empezara el verano, mis padres planificaron un viaje, el cual para mí sería una nueva experiencia pasamos un fin de semana de campamento, solo nosotros para encontrarnos como familia y que yo aprendiera de las bondades que nos da la naturaleza.
El lugar me asombro muchísimo, todo verde unos árboles gigantes más grandes que mi papá, me explicaron la importancia de los árboles que son los pulmones de nuestro planeta y que además son el refugio de miles de seres vivos, que debemos cuidar y proteger para que perduren en el tiempo y sigamos disfrutando de ella. –

Felicitamos a los ganadores y a todos los participantes del concurso «Te cuento de la Educación ambiental».

La fragilidad de lo excepcional

Uno de los motivos de orgullo, promotor de la identidad chilota y fuente de relevancia local y global del Archipiélago de Chiloé, es el reconocimiento mundial dado por Organismos de las Naciones Unidas a los diversos patrimonios vivos presentes en el territorio insular.

Recapitulando y refrescando la memoria: la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) inscribe el año 2000 a las 16 iglesias de Chiloé en la Lista del Patrimonio Mundial; y con ello reconoce a la escuela de arquitectura chilota asociada a las iglesias y la vida comunitaria que se desarrolla en torno a los templos y mantiene vivo el fervor religioso. El 2011 es la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) quien, después de un extenso proceso de postulación y análisis, entrega el reconocimiento oficial de sitio SIPAM (Sistema Ingeniosos del Patrimonio Agrícola Mundial), poniendo en relieve la rica biodiversidad agrícola, sumada al manejo de los agroecosistemas basado en la observación y conocimiento ancestrales.

Para tener un contexto, son 1.157 los sitios Patrimonio de la Humanidad declarados por la UNESCO, de los cuales 7 están en Chile: Las 16 Iglesias, el Parque Rapa Nui, las Salitreras Santa Laura y Humberstone, el Campamento de Sewel, el Casco Histórico del Puerto de Valparaíso, el Camino del Inca Qhapac Ñan y la Cultura Chinchorro y su sistema de momificación. Por otro lado, son 67 los sitios SIPAM por la FAO, siendo Chiloé el único en territorio nacional.

Y lo más sorprendente: el único lugar del mundo donde coinciden estos dos reconocimientos en un mismo territorio es CHILOÉ. Esta condición única y excepcional es evidencia de que aquí se conforma un universo cultural con características particulares cuyo aislamiento geográfico en el pasado ha permitido la conservación de prácticas agrícolas, religiosas y culturales hasta nuestros días. La forma de cultivar la tierra y el mar; el trabajo en madera para la construcción de embarcaciones, casas e iglesias; el desarrollo de artesanías en diversos materiales, las mingas, la gastronomía, el folclore, la música, los mitos, las leyendas, la religiosidad, son todas expresiones de las manifestaciones de la cultura chilota que se viven diariamente en forma cotidiana.

Los pequeños agricultores y agricultoras, que son también pescadores y recolectores, se han encargado del resguardo del patrimonio agroalimentario, el traspaso de generación en generación del conocimiento y tecnologías ancestrales y del desarrollo de una agricultura agroecológica comprometida y en constante diálogo con la tierra. Pero este diálogo y encuentro con la naturaleza es cada vez más difícil. Y la pérdida de esta interacción consciente, sumado al impacto que generamos en el medioambiente, es la mayor amenaza para el futuro del Patrimonio Chilote.

Sin sustento y soporte ambiental se va generando un proceso de erosión social de las tradiciones, donde es complejo mantener viva y creativa la cultura que le da vida a la esencia de Chiloé. Por eso es fundamental la tarea de resguardar el Patrimonio Ambiental de Chiloé. Proteger ecosistemas valiosos para el equilibrio ambiental es condición de posibilidad para mantener vivas las prácticas históricas. Y el proceso de degradación, deforestación y contaminación que podemos ver en diversos ecosistemas del archipiélago atenta contra un territorio sobre exigido. Por lo tanto, se valoran todos los esfuerzos en materia de conservación; sean públicos, privados; desde organizaciones civiles, ciudadanas y muchos anónimos que en la sumatoria pueden inclinar la balanza en un escenario de enorme fragilidad.

Damián Valdés
Encargado Comunidad
Parque Tantauco